octubre 12, 2012

REDES SOCIALES: CAOS SOCIALES



Casi con un año de diferencia, se da un hecho que vuelve a causar conmoción, caos e histeria colectiva en algunas zonas de nuestro país. En agosto del 2011 algunos usuarios de Facebook y Twitter comenzaron a esparcir “noticias” de manera reiterada y casi con plena convicción de que lo que compartían era cierto: había balaceras en varias escuelas de Veracruz, alertaban a todos los pobladores a que se escondieran y cuidaran a sus hijos.

Acto seguido, el Puerto y Boca del Río se paralizaron, cientos de padres de familia dejaron sus trabajos y literalmente corrieron a las escuelas de sus hijos para sacarlos y llevarlos a casa. Se reportaron al menos tres decenas de accidentes automovilísticos y las pérdidas de los comercios de la zona fueron casi al 100% durante esas horas de shock que vivió Veracruz.

A pesar de que la autoridad -a través de la prensa- se cansó de insistir que todo era falso, instando a la calma a la población, fue imposible evitar el caos y el descontrol. No habían pasado 72 horas cuando las autoridades del estado ya tenían ubicados y arrestados a dos individuos identificados como los principales responsables de esparcir esta serie de rumores (si, todo era falso, al parecer se originó de un “retweet” real de un suceso similar que aparentemente ocurría en una escuela de Ciudad Juárez, Chihuahua). Las dos personas arrestadas fueron acusadas de Terrorismo y Sabotaje equiparado; cargos que de haber sido probados, los hubieran hecho merecedores a penas de prisión probablemente superiores a los 40 años.

Sin embargo, gracias a la tremenda presión pública ejercida por la comunidad de las redes sociales, así como por organismos internacionales protectores y/o vigilantes de derechos humanos, la autoridad decidió retirar los cargos y ponerlos en libertad.

Al final de la primera semana de septiembre del año en curso se vivió un suceso similar, pero ahora en el Estado de México y en el Distrito Federal. Rumores de zafarranchos, robos, balaceras, ataques del crimen organizado y brotes de violencia en el municipio de Nezahualcóyotl y en la delegación Iztapalapa generaron una psicosis colectiva que obligó al cierre de establecimientos comerciales, negocios y escuelas de diversos niveles, lo cual derivó en pérdidas por más de $90 millones de pesos.

Estos rumores se esparcieron en vivo y en directo (hubo cuatro personas arrestadas que con megáfonos estaban infundiendo pánico entre la población), pero también en gran medida a través de las redes sociales. Aunque las autoridades llamaron a mantener la calma y negaron los hechos violentos, no pudieron evitar que la gente creyera los rumores.

¿Existe una manera efectiva para evitar que la gente (ignorante, chismosa, crédula y mitotera) propague esta clase de rumores? Probablemente no. ¿Debe considerarse como terroristas a quienes difundan estos rumores? Sin duda, no. ¿Debe castigarse a quienes circulen rumores infundados que causen pánico, terror o histeria colectiva? Claro que sí. Las redes sociales no pueden ser usadas para causar caos en la población.

La “libertad de expresión” no puede (ni está “diseñada” para) ser usada como escudo para cometer cualquier clase de fechorías sin temor a asumir consecuencias legales. Sin embargo, cualquier ley, reglamento o norma que pretenda regular estos actos debe ser redactada con sumo cuidado, para evitar que se convierta en una poderosa arma de censura (“ley mordaza”) para los gobiernos. Y tu mi querido lector… ¿qué opinas?

LA MEGA CARPA DE “SAN LAZARO”


El espectáculo alrededor de San Lázaro, no obstante lo repetido y desgastado, y la baja calidad histriónica de los que gritaban viejas consignas que ya hoy, a nadie mueven, no deja de sorprender.

La sorpresa no se debe, obviamente, a la nula conciencia política que exhiben los que sin tener algo productivo qué hacer —salvo el mitote callejero—, alborotan sin efecto práctico alguno; tampoco a su falsa disposición a “pelear por los intereses del proletariado y a detener –con la marea roja de su lucha– la nueva embestida de la burguesía”, sino a que aún hay por ahí decenas de ingenuos que acuden a la convocatoria de Gerardo Fernández para gritar consignas en sus actos dizque de protesta los cuales, lejos de despertar simpatía alguna por la causa que dice defender, avergüenzan a no pocos de los mismos que acudieron a su llamado.

También, debe decirse, la protesta absurda e inútil de Fernández Noroña y unos cuantos seguidores que le hacen coro afuera del Palacio Legislativo de San Lázaro, tiene en el seno de algunas bancadas, dos o tres seguidores y no pocos imitadores.

Estos últimos, en vez de entender la necesidad de cambiar una ley caduca que sólo ha beneficiado a unos cuantos pero no a los trabajadores y ofrecer argumentos que busquen construir el futuro, se lanzan al antepasado a hurgar en algún bote lleno de la basura ideológica que en los años treinta del siglo pasado era, como diría el clásico, “la mera ley”.

Da pena ver a quien uno consideraba inteligente e informado, plantear un discurso cuyo olor a naftalina marea; duele ver, al que durante años vivió la falta de futuro y el exceso de pasado que golpea a los más jodidos, regodearse hoy en las consignas de ese ayer dañino.

Duele, que aquél cuya honradez intelectual era ejemplo por su trabajo y entrega desinteresada aun cuando pudiera haber estado equivocado en algunos aspectos, se cobije hoy con las siglas de una de las muestras más burdas y ofensivas de la corrupción política.

Lo que hemos visto en San Lázaro, y lo escuchado en el seno de la Comisión de Trabajo y Previsión Social de la Cámara de Diputados en relación con la iniciativa para reformar la Ley Federal del Trabajo vigente, no debería sorprendernos.

Lo que vemos y escuchamos ahí, es expresión clara de este México que adora el pasado, que se resiste a concretar los cambios que desde hace años nos urgen para ponernos al día y participar (para aprovecharla), en la nueva realidad construida en el mundo durante estos últimos 50 o 60 años.

Duele pero debe decirse; ante la conducta de legisladores de los tres partidos de “izquierda”, no hay otro camino que unir las fuerzas de los que estén a favor de la modernización del país y el crecimiento económico, y sacar ésta y las otras reformas que faltan.

Los que son el lastre que nos impide avanzar, no tienen remedio; dejémoslos ahí con su megáfono gritando tonterías. Sin embargo, a los que ya viejos no se atreven a reconocer que en lo que creyeron sólo es hoy, dice Furet, “Le passé d’une illusion”, démosles el tiempo que necesiten para que mediante la autocrítica obligada, vean otra vez al futuro como no hace mucho hacían.

EMPRESARIOS CAMPECHANOS APUESTAN POR BYOD




BYOD es el acrónimo en inglés del término “trae tu propio dispositivo” (Bring Your Own Device), una tendencia mundial que llegó para quedarse, tal como las redes sociales y el cómputo en la nube. BYOD es una política de negocio que permite a los empleados traer dispositivos móviles propios (como teléfonos inteligentes, tablets e inclusive laptops) al trabajo y usar dichos aparatos para acceder recursos privilegiados de la empresa, tales como correos electrónicos, archivos en servidores y bases de datos -tradicionalmente almacenados en redes privadas virtuales (VPN’s)-, así como aplicaciones (software) y demás datos de la organización.

¿Qué beneficios trae el implementar una política BYOD en mi empresa/organización?

• Transfieres los costos del hardware (equipos), voz, servicios de datos y otros gastos asociados a los empleados (incluyendo tal vez no solo los costos de adquisición, sino del mantenimiento y actualización). Esta transferencia de costos puede ser total o parcial (subsidiar parte del costo del equipo y/o servicios de datos). De una manera o de otra, representa un ahorro importante para la empresa.

• Este cambio de paradigma brinda una satisfacción a los empleados, ya que tendrán la opción de traer al trabajo sus propios equipos (que en la mayoría de los casos ya usan o tienen). Si invirtieron en dichos equipos es porque les gustan (quien usa algo que le gusta trabaja mejor), y naturalmente cuidarán más un equipo propio que uno ajeno. En muchos casos, los empleados tienen mejores laptops, teléfonos y tabletas que aquellos que les proporcionaría la empresa, lo cual implica que la empresa estaría beneficiada con el rendimiento, características y bajo costo de mantenimiento de equipos de última generación. Además, los empleados suelen cambiar/actualizar su teléfono y laptop en ciclos mucho más breves (una vez cada 12 o 18 meses) a los que suelen tener las empresas (3 a 4 años).

¿Cuáles son los riesgos o desventajas de implementar una política BYOD?

• Como probablemente se lo imagina, el riesgo principal radica en el manejo, flujo, confidencialidad y seguridad de la información. Si existe una política BYOD en su organización, el empleado tendrá acceso, almacenará y usará información valiosa de la empresa en sus propios dispositivos. Como lo he comentado en columnas anteriores, existen numerosas leyes y regulaciones -en México y el mundo- que obligan a brindar confidencialidad y seguridad de la información y a proteger datos personales.

• También existe el riesgo de que el empleado pueda instalar en sus equipos programas de dudosa procedencia o realice descargas ilegales, lo cual representa un riesgo importante, tanto en el plano legal y como en el de seguridad informática. En el mejor de los casos, los equipos personales pueden traer un cúmulo de aplicaciones distractoras para el trabajo (música, videojuegos, chats, redes sociales, etc.)

• Algunos empleados traerán computadoras con Windows, otras con OS X, y algunos intrépidos usarán Linux u otros sistemas operativos de código abierto como Ubuntu o ReactOS. También habrá quienes prefieran software libre como Open Office o aplicaciones en la nube como Google Docs. Tratándose de smartphones y tablets los reyes son iOS y Android, pero Windows tiene ya sólidas estrategias para recuperar terreno en este mercado. ¿Se imagina lidiar con el reto multi-plataforma?

• Sin duda, existirán empleados que no puedan (o no quieran) darse el lujo de comprarse un equipo de última generación para usarlo con fines laborales. Entonces la empresa no solo enfrentará un reto multi-plataforma, sino también una amplia gama de equipos con diferentes capacidades y características. Hacer que equipos, sistemas operativos y aplicaciones tan diferentes funcionen entre sí puede ser complicado y costoso.

Aunque los riesgos parecen mayores en número y más alarmantes que las ventajas, no desestime el evaluar la implementación de “BYOD” en su empresa u organización. Los beneficios (ahorros, tecnología de punta y ambiente laboral) pueden ser suficientes para enfrentar los riesgos inherentes de esta plataforma. A fin de cuentas, todo cambio en el entorno laboral y de tecnologías de información debe de ir de la mano con una adecuada instrumentación de políticas internas claras que mitiguen los riesgos y controlen el acceso a los recursos de la empresa.

LENOVO LE PONE UN PIE A HP



Un rival con Gartner, IDC, aún considera que HP sigue ocupando el primer lugar -pero por menos de medio punto porcentual- en términos de ventas de computadoras personales en todo el mundo. Ambos estudios refuerzan las luchas de la empresa de Silicon Valley contra sus rivales en momentos en que su nueva presidenta ejecutiva, Meg Whitman, intenta reformar la estancada firma de 73 años.

Las ventas mundiales de computadoras personales cayeron más de un 8 por ciento el trimestre pasado, de acuerdo a las dos firmas de investigación. Esto se habría debido a varios factores, incluyendo los esfuerzos de minoristas y proveedores por deshacerse de inventarios viejos antes del lanzamiento del sistema operativo de Microsoft Windows 8, la creciente popularidad de aparatos móviles como los Tablet PC y una desaceleración de la economía.

El crecimiento de la demanda de computadoras personales se desmoronó en el último año a medida que más consumidores acudían a las tabletas ultra-portátiles y cada vez más poderosas y a los teléfonos inteligentes para labores de computación.

Ambos conjuntos de datos muestran que Lenovo, Acer de Taiwán y otros fabricantes asiáticos de computadoras personales están reduciendo la participación de mercado de sus competidores estadounidenses HP y Dell, que figuró como el tercer mayor fabricante mundial de computadoras personales en el trimestre.

Lenovo, que tiene un valor de mercado de 8.200 millones de dólares, dijo que cree que hay espacio para seguir creciendo en el sector. "Estamos estableciendo raíces aún más profundas en los principales mercados de todo el mundo. Además de las ventas localizadas y equipos de distribución en los principales mercados, estamos estableciendo una presencia de fabricación aún más fuerte", señaló el presidente del directorio y presidente ejecutivo, Yang Yuanqing, en un comunicado.

Este año la compañía compró al fabricante brasileño de productos electrónicos CCE, valorado en un precio base de 300 millones de reales (148 millones de dólares) y a la firma estadounidense de computación en nube Stoneware.

UN POCO DEL MUNDO PARA MANTENERNOS AL DIA



Tal parece que ya nos acostumbramos a la gravedad de la situación mundial la cual, aun cuando hayamos aceptado con cierta filosofía o cinismo desde hace una buena cantidad de meses que nada podemos hacer al respecto, pienso que es hora de volver a verla con detenimiento y seguirla de manera sistemática.

Si bien acepto que es muy poco o nada lo que podemos hacer para influir positivamente en el proceso de deterioro de aquélla, estoy convencido de la necesidad de cambiar nuestra actitud de displicencia (“Desaliento en la ejecución de una acción, por dudar de su bondad o desconfiar de su éxito”), dados los efectos que el agravamiento de las condiciones económicas y políticas en el mundo tendrá en la economía de Estados Unidos.

La campaña por la Presidencia de ese país, que con la celebración del primero de los tres debates entre los candidatos Obama y Romney entró a su recta final, sin duda resta atención a sus problemas estructurales; la gravedad de éstos requiere, inevitablemente y a la brevedad, medidas dolorosas e impopulares que sin duda tendrían un impacto de consideración en sus finanzas públicas, en lo que se refiere al déficit y el monto de su deuda pública.

Las condiciones en Europa las cuales, lejos de presentar una leve mejoría apuntan en la dirección contraria, se verán reflejadas, más temprano que tarde, en la economía de Estados Unidos; es ahí donde entramos nosotros.

Sería una irresponsabilidad inmensa, si Peña Nieto y su equipo pretendieren ignorar, o minimizar siquiera, los efectos de una situación así en la economía de nuestro principal socio comercial; es más, igualmente irresponsable sería mantener el triunfalismo calderoniano (que sus colaboradores repiten mecánicamente e inundan con él sus desangelados discursos), que pretende hacernos creer que nuestra economía es fuerte y en crecimiento sostenido, lo que nos protege contra toda contingencia.

Europa y Estados Unidos, sumidos ambos en una crisis a la que no se le ve salida la cual —en tanto no acepten sus gobernantes y las principales fuerzas políticas la urgente necesidad de realizar cambios estructurales profundos que impactarían negativamente en su crecimiento económico este decenio—, seguiría agravándose.

Si a lo anterior sumáremos la desaceleración que registra la economía de la República Popular China y la de la India, el panorama pasaría de un gris muy oscuro a la negrura casi total.

Para no desanimarlo, me abstengo de agregar a lo anterior detalles y consecuencias del conflicto surgido entre Japón y China por la disputa de un archipiélago conformado por un puñado de islitas rocosas; menos voy a ponerle a este coctel explosivo la gravedad estructural de la economía japonesa. Sin embargo, sí le pondré algunos granitos de sal para ver si usted deja la apatía y empieza a preocuparse del futuro que nos espera.

¿En alguna ocasión ha mencionado el presidente Calderón, el monto que ha alcanzado la deuda pública interna? ¿Nos ha hablado del impacto que sufrirían nuestras débiles finanzas públicas, si las tasas de interés internas subieren dos o tres puntos? ¿Conocemos con exactitud, los pasivos contraídos por más de 100 sistemas públicos de pensiones?

No desespere, en unos meses conoceremos todo eso, y aún más. Por eso le pido, siga por favor el deterioro de la situación mundial porque sin duda, nos va a afectar. Ya no huya de la realidad; únase a nosotros, regrese ya a la pesadilla.

REFORMA LABORAL (PARTE II)




Uno de los recursos que utilizan no pocos de nuestros legisladores y los que buscan que ciertas reformas aprobadas no entren en vigor a pesar de haber satisfecho los requisitos que el procedimiento parlamentario exige, es dejar en el limbo el reglamento de la ley aprobada o bien, no hacer las adecuaciones a las leyes relacionadas sin las cuales, como hemos visto en varias ocasiones, una ley —en los hechos—, no puede entrar en vigor.

¿Qué dice esta práctica de nosotros? ¿Qué nuestros legisladores son tan ignorantes, que no saben que cuando el Congreso reforma una ley, las con ella relacionadas, los códigos de procedimientos y los reglamentos involucrados, también deben adecuarse para que la aprobación sea integral y efectiva?

¿Acaso en los países donde el Legislativo —Congreso o Parlamento—, actualizó sus leyes caducas para adecuarlas a una nueva realidad, sus integrantes dejaron las normas relacionadas o las secundarias para después y así, en los hechos, impedir que lo aprobado entrara en vigor? ¿Esto es lo que hemos visto en España, Irlanda, Polonia, Hungría, Chile, Corea y Taiwán así como en la República Popular China y la India, entre decenas de países que han adecuado su marco jurídico a las nuevas condiciones?

Evidentemente, no; en esos y en cualquier país digno de ser considerado serio, los subterfugios baratos como los descritos al principio, son impensables; en otros, donde el cinismo y la falta de compromiso con el cambio son regla no excepción, y donde se dice sí a una iniciativa de reforma a sabiendas de que se cuenta con el recurso que impediría la aplicación inmediata de la iniciativa aprobada, las cosas no mejoran y el avance es una aspiración permanente.

Si bien no lo fue en aquellos, sí podría estar sucediendo entre nosotros con la iniciativa preferente que en materia laboral envió el presidente Calderón al Congreso de la Unión.

¿Acaso no hay leyes o algún reglamento que deba ser adecuado a lo que será la nueva Ley Federal del Trabajo, una vez que el Senado de la República cumpla con su parte del proceso legislativo? ¿Qué pasa con la “parte procesal”? ¿En verdad, todo lo que debe adecuarse lo toma en cuenta la iniciativa presidencial?

¿Es posible, entonces, que no haya necesidad de reformar algo fuera de nuestra caduca Ley Federal del Trabajo? Pero si lo hubiere, ¿qué pasaría entonces con la reforma laboral que aprobare el Congreso, si no lo hiciéremos? Además, de haberlas, ¿cuándo se harán las adecuaciones a las otras leyes, códigos y reglamentos o lo conducente en la parte procesal?

Ahora bien, aceptemos que la reforma laboral no presenta la necesidad de cambios en normas secundarias, pero ¿por qué no ir más allá de lo planteado por el Ejecutivo? Es más, si hay la consciencia de que ciertos cambios deben pasar por la reforma constitucional como será seguramente el caso con las otras —fiscal, energética, educación y agraria entre otras—, ¿qué harían los legisladores si el Ejecutivo no enviare aquélla?

¿Se limitarían a declarar que el Ejecutivo no envió la iniciativa de reforma constitucional? ¿Dónde queda entonces la capacidad que tienen de iniciativa? Es más, ¿si no estuviere en el ánimo del Ejecutivo entrar a reformar la Constitución, tampoco lo estaría en ellos?

Esto último es lo que mantiene vivo nuestro caduco andamiaje jurídico, el miedo de los legisladores a cambiar y al igual que en estos 12 años, también del Ejecutivo.

FUERA DE LA CAJA



Si algún elemento útil sacaremos de las reuniones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial este año, es más claridad acerca de la falta de acuerdo que existe entre los líderes globales en cómo enfrentar la crisis actual que en estos días llega a su quinto aniversario.

Usted sabe, amigo lector, que un servidor de rato en rato tiende a pensar en opciones de solución para una situación con dificultades de solución, en eso que llaman “ideas fuera de la caja” y éste es el caso.

Me refiero a la manera de lidiar al toro que todos tenemos enfrente desde hace ya un buen rato y al que, por lo visto, no hemos podido encontrarle el modo.

Lo que también queda claro es que al menos en lo que a Europa respecta, la postura de los integrantes de algo que hasta ahora presume ser el intento más serio de integración, no es del todo simple y amenaza con resultar un intento fallido. Y la falla sería realmente grande, rebasando los límites de esa región.

La postura que el FMI ha manifestado en estos días parece estar afuera de los límites de la caja, en tanto que la posición alemana insiste en mantener dentro de tales límites cualquier posible solución a los problemas que enfrenta Europa.

Lo anterior lleva con facilidad a varias ideas: una es que la Unión Europea no es precisamente eso, una unión. La otra es que carece de mecanismos eficaces y aceptados por todos sus miembros para solucionar sus controversias críticas.

Una más en que en estos momentos no hay en estricto sentido voluntad política real para encontrar vías de solución viables.

Hace algunas semanas escribí en este espacio que quizá los tomadores de decisiones a escala global, al menos en lo que toca a los temas económicos, estaban enfrente de una situación que los rebasaba y a la cual enfrentaban con medidas diseñadas para las crisis que este mundo vivió en el pasado y, por lo tanto, quizá había que pensar en utilizar, quizá inventar mecánicas diferentes.

El FMI, en boca de Christine Lagarde, su directora gerente, ha hablado en estos días de la posibilidad de flexibilizar las reglas a las que están o estarían sujetos los países europeos (concretamente Grecia y España) comprometidos en programas de estabilización, toda vez que ante las condiciones actuales el cumplimiento está lejos de la realidad.

La respuesta de Alemania, representada por su ministro de finanzas, Wolfgang Schäuble, es que no se puede. Es decir, prefiere mantener las reglas actuales, que parecen son incumplibles.

En el fondo pareciera que hay una condición que el señor Schäuble hace a un lado: Grecia, España, Italia, Portugal, Irlanda y cualquier otro país en condiciones críticas en la región son parte de la Unión Europea.

Si tales países rebasaron las reglas que supuestamente debieron cumplir y no lo hicieron, habla de la debilidad de las estructuras legales y de supervisión y control de la Unión Europea, partiendo de la base que es una institución que tiene reglas supranacionales que atender.

De ninguna manera justifico las acciones que han llevado a los países en problemas a su condición actual, pero también creo que habría que considerar las opciones reales que existen y las consecuencias que supondría mantenerse en la línea ortodoxa de política económica.

Tampoco estoy pensando en que no paguen por lo que deben, pero sí en los supuestos establecidos. Es obvio que no podrán cumplir; la mínima lógica sugiere que tendría que habría que pensar en opciones diferentes.

Soy de los mexicanos que vieron a este país cometer error tras error en el manejo de su economía y que vivieron años, muchos años, sin que se registrara crecimiento en el PIB per cápita.

Lo anterior significa que las posibilidades de progreso eran mínimas y algunos sobrevivimos. Pero la mayoría sufrió un retraso enorme en su bienestar y en promedio seguimos pagando por ello, pues muchas de las decisiones de políticas públicas se hacen viendo hacia atrás, lo que implica que todos vamos más lento hacia adelante.

Pero pagamos y salimos. Hoy estamos en mejor posición que la mayoría de la comunidad global.

Las condiciones de hoy son mucho más críticas que las que enfrentamos hace algo más de tres décadas. En aquel momento se inventaron mecanismos que nos permitieron salir del atolladero, no sin costo, no rápido, no sin bronca. Creo que hoy estamos en presencia de una situación similar, pero más compleja y de mayores alcances e impactos. Habría que explorar opciones “fuera de la caja”. Suerte.

LEY CONTRA EL LAVADO DE DINERO



Aunque habrá quien vea el vaso medio vacío, yo prefiero verlo medio lleno y sí creo que es una buena noticia la aprobación de la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita, mejor conocida como la ley contra lavado de dinero.

A pesar de que el presidente Felipe Calderón hizo una prioridad la lucha contra el crimen organizado no es hasta ahora, al final de su sexenio, que fortalece el marco jurídico para perseguir a los delincuentes en la ruta del dinero.

Fueron varios los obstáculos que enfrentó la ley contra el lavado de dinero y desafortunadamente quienes más se opusieron fueron algunos de los sectores que evidentemente se verán afectados con las restricciones de operaciones en efectivo: desde los agentes inmobiliarios hasta joyeros, vendedores de automóviles, corredores y notarios públicos.

Fueron estos sectores los primeros que protestaron a la propuesta original de la SHCP de limitar las operaciones en efectivo a un monto de 100 mil pesos. Finalmente, lo que se aprobó ayer en el Senado son límites más altos: medio millón de pesos para bienes inmuebles y 200 mil pesos para todo tipo de vehículo nuevo o usado; obras de arte, joyas, metales y piedras preciosas, y compra de boletos de apuestas o sorteos.

Lo ideal desde luego es que el límite fuera de 100 mil pesos y que en venta de autos, joyas, obras de arte y bienes inmuebles se prohibieran totalmente las operaciones en efectivo, pero por lo menos se lograron establecer límites y se obliga además a que se reporten operaciones sospechosas, independientemente de su forma de pago.

Se crea una Unidad especializada en análisis Financiero en contra de la Delincuencia Organizada en la PRG, que complementa a la Unidad de Inteligencia de la SHCP.

Y se obligará a joyeros, corredores, notarios, abogados e intermediarios financieros a tener una política de identificación de sus clientes y reportar, como hacen ya los bancos, operaciones sospechosas, independientemente de su método de pago.

Además, las asociaciones civiles también tendrán que elaborar reportes por donativos en efectivo que reciban por montos superiores a 100 mil pesos, porque se detectó que una forma de lavado de dinero es a través de donativos a supuestas fundaciones de beneficencia.

Mexicana, ¿se declarará en quiebra?

La juez Edith Alarcón, que está al frente del proceso de Mexicana de Aviación, sorprendió al demostrar que no es tan suavecita o ingenua como muchos pensaban.

Se tardó, pero finalmente se dio cuenta de que Christian Cadenas, representante de Med Atlántica es un farsante, ya que no pudo demostrar en más de cuatro meses que tenía los 300 millones de dólares para capitalizar a Mexicana de Aviación.

De hecho, los únicos que creyeron en Med Atlántica fueron los trabajadores de Mexicana de Aviación y la secretaria del Trabajo, Rosalinda Vélez, quienes creyeron en el juez Felipe Consuelo, quien aseguraba que Cadenas sí tenía dinero por un supuesto cheque que le mostró y que evidentemente nadie nunca vio.

¿Qué sucederá ahora? El siguiente paso sería aceptar la propuesta de los acreedores de nombrar un interventor para tener acceso a la información que hoy oculta Badín, a fin de que tanto acreedores como la juez sepan realmente cuál es la situación de la empresa.

La lógica diría que la juez Alarcón procediera a la quiebra de Mexicana, porque la aerolínea lleva ya más de dos años en Concurso Mercantil y sin operar, pero lo único cierto es que en el caso de Mexicana no se aplica ni la ley ni la lógica, sino oscuros intereses.

No extrañaría, por lo tanto, que Gerardo Badín, quien fue absurdamente ratificado en su cargo por la juez Alarcón, asegure que hay un nuevo grupo interesado en la aerolínea.

Supuestamente, Alarcón ya comenzó a darse cuenta de que en realidad no hay ningún avance en las negociaciones con acreedores y exigió ya a Badín cuentas sobre la administración.

El futuro de Mexicana está en manos de la juez Alarcón, pero mientras más tiempo pase en la indefinición se deterioran más sus activos.

¿Y LA NIEVE, DE QUE LA QUIERES?



Una expresión a la que recurríamos en los años de infancia cuando uno de nosotros pedía algo que era considerado absurdo o irrealizable, era: ¿Y la nieve, de qué la quieres?

Nuestra ingenuidad e ignorancia en esos años, nos permitía desechar de inmediato lo que el compañero pedía por considerarlo absurdo o imposible; hoy, dado que ese carácter lo tiene la democracia y transparencia sindical por decreto, deberíamos preguntar lo mismo a los “intelectuales progres”, a tanto “experto de prestigio” y a no pocos opinantes y a dos o tres conductores cuya fuente de sabiduría no es otra que el teleprompter.

Todos ellos, con legisladores y dirigentes panistas, quienes no acaban de entender el porqué de la derrota aplastante sufrida hace unas semanas, exigen con la enjundia de los viejos radicales, que las modificaciones que representan aquélla sean incluidas en la Ley Federal del Trabajo que en unos días aprobará el Senado.

La subjetividad de los que ignoran el proceso de toma de conciencia en los trabajadores para decidirse a luchar por el cumplimiento de ésta o aquella demanda, deja ver en ese abigarrado grupo un desconocimiento de la realidad que enfrentan los trabajadores, tanto en su trabajo como en su vida cotidiana.

Esto los exhibe tal cual son, exhibicionistas cuyo único afán es atraer los reflectores.

Esos falsos redentores de una clase obrera que sólo está en su cabecita de “intelectuales progres”, piensan que vivimos a principios del siglo XX cuando la necesaria conciencia revolucionaria del proletariado para lanzarse a derrocar a la burguesía, era resultado del trabajo de concientización de intelectuales revolucionarios que se “fundían” (así rezaba el cliché usado en los años sesenta) con la clase obrera.

Esa idea, fundamental en la Revolución Bolchevique, lo fue también en las encabezadas por Mao Tse-tung, Kim Il-sung y Ho Chi-Minh en China, Corea y Vietnam años después.

Ahora bien, ¿es factible esperar hoy, por la simple la inclusión en una ley de una demanda, más inventada que real como ésa de “la democracia y transparencia sindical” (como aquellos ingenuos y oportunistas pretenden hacer creer), que los trabajadores sindicalizados se lancen —como reflejo condicionado— a “romper las cadenas de la explotación que sufren a manos de los líderes charros”?

Se requiere ser muy ingenuo o pícaro (bajo, ruin, doloso, falto de honra y vergüenza), para pensar que eso sucederá; de ahí que la obligada respuesta a los pataleos pueriles de Lozano y Cordero (que amenazan con seguir en la lucha, no como asesores de obreros sindicalizados explotados, sino como senadores con jugoso sueldo) para incluir en la ley la manoseada democracia y transparencia sindical, sea ¿Y su nieve, de qué la quieren?

¿Por qué les cuesta tanto trabajo entender que los trabajadores sindicalizados —salvo unos cuantos que pertenecen al Apartado B—, no tienen entre sus demandas prioritarias la manoseada “democracia y transparencia sindical”? La realidad del trabajador —sindicalizado o no—, es mucho más terrenal y dolorosa que la falta de democracia y transparencia.

¿Por qué no dejan ese oportunismo que a nadie beneficia, y trabajan para construir las soluciones de los problemas del país?

REFORMA LABORAL (PARTE I)

La aprobación en la Cámara de Diputados de la iniciativa preferente de reforma laboral enviada por el presidente Calderón es, no hay duda, el primer paso de una larga marcha que ya empezó pero, desconocemos cuándo y cómo concluirá.

Se pudo diría Madrazo pero, se pudo poquito; sin embargo, los tiempos dirán si “ese poquito” fue útil para que los trabajadores impulsen lo que faltó.

Por lo demás, por encima de lo aprobado en San Lázaro, debe tenerse en cuenta que aún falta el trecho del Senado de la República. Por ello, no echemos desde ahora las campanas al vuelo.

Por lo demás, no tiene caso extenderse en el espectáculo de los que evidenciaron, otra vez, que la democracia no es lo suyo. En consecuencia, como lo evidencia su conducta en las Cámaras que raya en lo gangsteril, ¿por qué se les trata sólo con los instrumentos de la democracia, como es el debate y el voto mayoritario?

¿Acaso no saben que hay otras medidas —que la ley señala claramente—, para poner un hasta aquí a estos grupos que digan lo que digan, están a años luz de lo que debe ser un legislador? Pero, mejor dejemos esto y vayamos a lo trascendente.

¿Será verdad que la sola reforma —una vez que el Senado hiciere su trabajo—, crearía 400 mil empleos formales, como declaró la secretaria del Trabajo? Los excesos triunfalistas han llegado a niveles de insania; la mejor prueba es la que dieron los ocho diputados federales del PAN de Sonora que afirman, en la entrada de su desplegado de hace dos días en El Imparcial de Hermosillo que “Los diputados del PAN hemos hecho historia, hemos cambiado el futuro de México”. (Achíquenle, achíquenle).

Por si esto no bastara, antes de los 29 “logros” agregaron esta otra Perla Japonesa diría Nikito Nipongo: “Logramos en 28 días lo que en 42 años no se había podido alcanzar, aprobar una reforma laboral que mejora y fortalece los derechos de los trabajadores”.

Si dejamos de lado la pésima sintaxis que exhibe su nivel gramatical, sorprende la exageración y la soberbia que campea en ambos párrafos. Asimismo, debo destacar que uno de los firmantes —Mario Sánchez—, parece no haber aprendido lo más elemental de la política durante los años que pasó —¿desperdiciados totalmente?— en altos puestos directivos de la Canaco y el CCE.

¿Qué se requiere entonces, para generar los cientos de miles de empleos formales que el país exige? Evidentemente, más que el primer paso que dio la Cámara de Diputados.

Las reformas relativas a la energía, el sistema tributario, el campo y la educación, por señalar algunas, así como la prueba clara del compromiso del Ejecutivo para aplicarlas sin reserva alguna, son los elementos que vendrían a restablecer la confianza perdida del inversionista para tomar riesgos y crear fuentes de empleo.

De no darse aquello, podrán los diputados federales del PAN Sonora seguir con sus exagerados y triunfalistas desplegados pero, los cientos de miles de empleos formales brillarán por su ausencia.

Todo indica que no se resignan a su suerte; quien deberá concretar ahora las reformas y dar pruebas de una gobernación efectiva, de resultados, es Enrique Peña Nieto. Fox como Calderón, demostraron no saber o no poder. Lo otro, con todo y desplegados, es literatura.