Cito a José Cárdenas, quien ayer, escribió: “¿Quién en su sano juicio podría apostar hoy por la derrota del PRI? La encuesta de encuestas elaborada por Roy Campos, de Consulta Mitofsky, monta a Enrique Peña Nieto en caballo de hacienda. Lejos, muy lejos, de sus dos competidores. (…) Roy comparó los sondeos de cinco casas encuestadoras desligadas de los partidos políticos. (…) En cuatro de los cinco sondeos, la diferencia entre Peña Nieto y Josefina Vázquez Mota oscila entre 16 y 19 puntos. (…) Los que saben, dicen que las encuestas son fotografías del momento. El problema para quienes no son priistas es que el momento no va a cambiar, por lo menos en los próximos 27 días. (… ) El último día de marzo las cosas seguirán como están ahora.”
Yo sumo mi opinión a la de Cárdenas y agrego que entre el último día de marzo y el primero de julio “las cosas” quizá puedan cambiar, pero no lo suficiente para impedir el ya inevitable triunfo de Enrique Peña Nieto en la elección para Presidente de la República, por el periodo 2012-2018. Razono mi opinión: En el reporte firmado por Ulises Beltrán y Alejandro Cruz sobre la más reciente encuesta nacional en viviendas de BGC-Excélsior y publicada en la página 8 de la primera sección de Excélsior del lunes 5 de marzo de 2012, se presenta un cuadro de Evaluación Comparativa de Atributos. Encuentro relevante que en todos y cada uno de los diez atributos considerados, Enrique Peña Nieto prácticamente duplica la calificación en puntos porcentuales de sus dos principales competidores: Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador. En lo referente a ser “más cercano a la gente”, Josefina obtiene 15%, Peña Nieto 40% y Andrés Manuel 27%, la más alta que AMLO obtiene en los diez atributos. En cuanto a tener mayor experiencia para gobernar: Vázquez Mota 11%, López Obrador 21% y Peña Nieto 44 por ciento. La calificación más alta que obtiene Josefina es en lo que se refiere a mejorar la educación, donde alcanza 20%, contra 19% de Andrés Manuel y 44% de Enrique Peña Nieto. En lo que se refiere a “firmeza para combatir la inseguridad y al crimen organizado”, Peña Nieto obtiene 44%, contra 19% de Vázquez Mota y 18% de López Obrador.
Todo esto demuestra que el electorado mexicano es ya mucho más informado y capaz de juicios racionales y certeros de lo que suponen los estrategas de las bobas y repetitivas campañas de desprestigio y descalificación de adversarios. Pero el dato más importante es el que resulta de las calificaciones en el atributo “representa más un cambio”: López Obrador 21%, Vázquez Mota 18% y Enrique Peña Nieto 40 por ciento. Este dato muestra de manera evidente que es Enrique Peña Nieto el candidato que ha logrado posicionarse como el abanderado del cambio ante una nación mexicana que está desesperadamente ávida precisamente de eso: de cambio.
En los procesos electorales de trascendencia y sobre todo en los sistemas presidencialistas como el nuestro, la decisión de los votantes se decanta finalmente entre dos y sólo dos opciones: la del cambio y la de la continuidad. Y hoy, en México, por las razones que sea, la gran mayoría de los mexicanos anhela un cambio en el rumbo que al país se le traza desde los poderes legalmente constituidos, en especial desde el liderazgo que por nuestras instituciones y por nuestra cultura política le toca ejercer al Presidente de la República. Es claro ya que esa opción de cambio la encarna hoy Enrique Peña Nieto. Esto parece muy difícilmente reversible y por eso su triunfo parece prácticamente inevitable. Entre más pronto incluyan todos los actores del proceso político este dato, este hecho patente, en sus escenarios y comportamientos, más terso será el tránsito hacia la segunda alternancia, y hacia una democracia mexicana cada vez más plena y funcional.
mui buena pagina y productiva
ResponderEliminarsaludos lic. Alejandro